Elogio a la Ignorancia.
Tertuliano.
Muchos
de ellos han decidido que el uso de la mente y la vida intelectual le ha hecho
mas daño que bien a la iglesia. Charles Finney: Lamento en una
oportunidad que los ministros “salieran de la Universidad” con un corazón tan
duro como la misma[1]. Mi
experiencia al inicio de mi caminar en el evangelio fue que mi pastor, un
hombre graduado en un instituto bíblico y profesional se negara a firmar mi
carta para yo iniciar mis estudios Teológicos.
Peter
cartwright, un líder metodista, escribió en su biografía 1856:
¡Los
analfabetos predicadores metodistas en realidad prendieron fuego al mundo
cuando estaban encendiendo los fósforos!
… No
subestimo la educación, pero en realidad he visto tantos de esos predicadores
instruidos que me hacen recordar a la lechuga que crece a la sombra de un
duraznero, o a un ansarino que se ha despatarrado por caminar en el roció, que
me alejo enfermo y mareado… ¿Qué ha hecho por el bien del mundo el clero
instruido, que ha estudiado la divinidad como ciencia?[2]
De la
misma manera D. L. Moddy desacredito a la teología formal. Cuando se le
pregunto sobre la suya, dijo: “¡Mi teología! No sabía que tenía alguna
Ojalá usted me dijera cual es mi teología.
También
este predicador dijo en una ocasión: “No importa cómo se lleva a un
hombre a Dios, con tal que se consiga”
Detrás de todos estos comentarios y actitudes negativas esta tal vez el temor y la preocupación por comparar el conocimiento del mundo con el conocimiento bíblico y teológico, es cierto que muchas personas han usado el conocimiento como un arma en contra de otras personas, pero eso no nos da el derecho de condenar o desprestigiar a la educación teológica, una ciencia y reina que nos abrió paso a través de la reforma para no ser esclavo de ideas y tradiciones sin ningún fundamento bíblico.
Sin embargo, a través de la historia diferentes denominaciones y movimientos en Latinoamérica han promovido el anti intelectualismo como un medio de purificación y despertar espiritual en palabras de Gonzalo Báez- Camargo:
Diferentes
grupos protestantes en sus misiones en Latinoamérica afirmaban: “La verdadera
espiritualidad no necesita de ilustración y la cultura” haciendo de la
ignorancia una virtud[1].
Es absurdo imaginar que grupos cristianos rechacen el conocimiento y la preparación que indudablemente fue lo que logro que el libro volviera al pueblo, la alfabetización de comunidades enteras, en qué momento la ignorancia es más valiosa que la educación bíblica. Como en la reforma el antídoto al intelectualismo es la restitución de la educación teológica centrada en la palabra de Dios. Predicar de manera expositiva y no especulativa, entender que para preparar un sermón necesitamos colocar nuestra mente al servicio de Dios y al predicarlo también.
Tomado del Libro. ¿Qué es un teólogo?. Dr. Luis Blanco.
[1]
Gonzalo Báez- Camargo, Genio y espíritu del metodismo wesleyano, Cupsa, México,
1981 (primera edición: 1962), P.46.
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