Reflexión Teológica sobre el uso de la Tecnología y las redes sociales en la iglesia...

Hace unos meses me encontraba en una conferencia continental de Teología en la ciudad de Ecuador, y pude compartir con los hermanos y representantes de Logos, los cuales nos mostraron las bondades de su nuevo software Bíblico Logos 7. Una herramienta muy importante para el estudiante de teología y para los predicadores. Ellos decían: ¡olvídese de llevar ese gran compendio bíblico¡ ¡Usted puede tener diferentes versiones de la biblia en un solo programa¡. Eso es genial...

No crea que esto criticando la tecnología ni mucho menos, ya que me sirvo de ella, y aunque no tengo el nuevo software de Logos, me gustaría tenerlo, la intención de esta nota es para que reflexionemos en el ámbito en el cual nos desenvolvemos, la iglesia protestante, ya muchos creyentes no llevan biblias en físico sino en su tableta, Smarphone etc... Y el pastor o predicador si no esta acostumbrado o no acepta el cambio debe lidear con ello. Todo esto, nos guste o no nos guste, ya forma parte de los tiempos en los que vivimos. La gran pregunta es ¿Seremos “AMIGOS” o “ENEMIGOS” de la TECNOLOGÍA? La Biblia nos da luz en cómo debemos utilizar estas herramientas tecnológicas ( 1 Corintios 6:12).

Dios nos dejó una Misión Globalizada por hacer ( Mateo 28:19-20 y Marcos 16:15). Si somos personas “entendidas en los tiempos” en que vivimos, podemos utilizar todas las tecnologías que están a nuestra disposición a fin de llevar a cabo esta gran tarea.

He visitado iglesias que han incorporado lo más avanzado en tecnología en sus servicios o reuniones públicas. Predicadores y maestros utilizando computadores, proyectores de imágenes que se utilizan para guiar al público en las canciones, clases o prédicas; vídeos de testimonios de trabajos misioneros, lo mejor en equipos de sonido, etc., con la finalidad de que el mensaje de la Palabra de Dios sea mejor presentado y comprendido por el público. Esto demuestra que las iglesias no dan la espalda a las tecnologías, sino que se están equipando para un mejor servicio.

Hace unos años un gran amigo predicaba desde su púlpito, que la red social facebook era un instrumento del diablo, y claro esta, todo depende del uso que le demos al instrumento y como esta influenciara nuestra vida. Ahora este amigo tiene cuentas llenas en dicha red social, ademas de las otras que usa y que abarca una gran cantidad de personas, donde trasmite sus sermones y palabras a diario. Indudablemente que las redes sociales en Venezuela han influido en la conducta de los venezolanos, incluyendo a los cristianos, pero les repito la culpa no es de la tecnología , sino del uso y la motivacion que la persona pueda darle a ella. Por ejemplo: Tenemos la Internet, pero dependerá de mi si la uso para edificar a otros, o para ver pornografía.

La famosa revista Producto dice en un articulo de Agosto que Venezuela ocupa el noveno lugar en el mundo en el uso de las redes sociales, que es usado por casi 11 millones de personas , a través de sus diferentes plataformas como Instagram, Twitter, Snapchat y Facebook. Todo pastor o predicador que desee llegar a las multitudes debe echar mano de la tecnología.

De acuerdo a elestimulo.com 9 de cada 10 venezolanos tiene una cuenta en Facebook. Y 7 de cada 10 tienen una cuenta en Twitter. El 86% dice visitar constantemente YouTube y cerca del 50% asegura tener una cuenta en Instagram. Cuando se trata de temas vinculados al deporte, a la farándula y al turismo, Facebook parece ser la plataforma ideal. Además, según algunos expertos, esta red social está dirigida, especialmente, al público femenino. (datos de Agosto 2016).

En el ámbito religioso, la iglesia católica incentiva el uso de las redes sociales para llegar a mas personas, “La Iglesia debe tomar en cuenta en sus aspectos de Evangelización que 8 de cada 10 venezolanos tienen un perfil en Facebook y otro tanto en Twitter. Pasamos más tiempo conectados en las redes sociales que los ciudadanos de otros países en América Latina”, dijo el experto. Lamentablemente en nuestro pueblo y cuerpo protestante todavía hay ideas cerradas sobre el uso de estas plataformas o redes sociales, aunque algunas se han abierto a ellas. con un efecto retardado pero se han unido a la tecnología.

En mi caso particular uso casi todas las redes sociales, lo que me permite estar en contacto, así sea de manera virtual con los miembros de mi congregación, así como con mis estudiantes, colegas y pastores dentro y fuera del país. En los tiempos del Apóstol Pablo no existían estas redes por supuesto, pero él supo usar la tecnología de su tiempo; correos, viajes en barcos, mensajeros, etc... No se negó a predicar el evangelio, sino que uso de manera inteligente y eficaz los medios con los que contaba, porque el problema no son los medios, sinos quienes no lo saben usar.

En mi congregación pido el domingo a todos que abran sus biblias, pero que también enciendan sus equipos donde tienen descargadas sus biblias ( incluso de varias versiones), hace unos años atrás, no lo hubiera pensado pero hoy es necesario hacerlo. La tecnología en la iglesia ha aumentado y dependerá de usted y de mi sacarle el mejor provecho, para que la misma sea una plataforma que trabaje en función del mensaje del evangelio. Gracias a Youtube, puedo tener vídeos grabados de mis predicaciones para los que no pueden estar en la congregación, tengo dos programas de radio y durante su trasmisión están muchas personas interactuando conmigo por twitter, y viéndonos simultáneamente por Streaming puedo acceder a sus comentarios y medir el impacto del evangelio en sus vidas en tiempo real.

Conclusión

La relación de la Iglesia con el uso de la tecnología y las redes sociales, no es incompatible con una vida de fe, oración y búsqueda constante del Espíritu Santo, el uso de los dones para el desarrollo de la iglesia y su labor evangelizadora. Es una herramienta mas para seguir impactando de manera inteligente a nuestra sociedad con el maravilloso mensaje del evangelio.

Bendiciones

Pastor Luis Blanco

Magister en Teología. Universidad Rhema, Nashsville Tennessee.